El gobernador del estado Táchira, Freddy Bernal, puso en duda el desarrollo de la celebración de los carnavales en San Antonio del Táchira y Ureña tras el reciente atentado ocurrido en Cúcuta, cuando un auto explotó cerca de la frontera.
En una rueda de prensa que se desarrolló este viernes, Bernal precisó que la explosión ocurrió a 10 kilómetros del puente Simón Bolívar, por lo que se ha visto obligado a "garantizar la tranquilidad de todos los tachirenses y todos los extranjeros que estén en San Antonio y Ureña".
Asimismo, el gobernador afirmó que se encuentra en comunicación con la alcaldesa del municipio Bolívar, Sandra Sánchez, debido a que tomarán una decisión final, depende de cómo se vayan desarrollando los acontecimientos en Norte de Santander.
"La maldad no tiene límites y los terroristas no tienen escrúpulos. Yo tengo la obligación de pensar en la paz del Táchira, en la paz de los habitantes de San Antonio y en la paz de los habitantes de Ureña", agregó Bernal. "Recuerden que aquí estamos para protegerlos a ustedes: primero la vida, después la diversión".
Del mismo modo, el gobernador puntualizó que los habitantes no deben tomar riesgos innecesarios: Nosotros hemos celebrado siempre unos carnavales bonitos, animados. Vamos a evaluar qué nos señalan los entros de inteligencia y qué nos dice el sentido común
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