ANDREINA DoMINGUEZ U.
Escasez
Los productos de higiene personal son otro de los rubros por los que millones de venezolanos tienen que hacer “de tripas corazones” para adquirirlos; por lo que lucir un aspecto limpio y aseado se ha convertido en otra difícil tarea para los criollos.
En un recorrido realizado por el equipo del Diario 2001, se pudo evidenciar que la oferta de artículos como: pasta dental, desodorante, champú y jabón de tocador son casi inexistentes en las grandes cadenas de mercado.
En el Locatel de Las Mercedes, Caracas, sólo hay antitranspirantes en crema y son de una marca poco conocida; éstos cuestan Bs 3.288 por unidad. Clientes aseguran que la calidad “no es muy buena” pero que los compran porque “es lo que se consigue”.
En cuanto al champús también hay poca variedad, de hecho los únicos disponibles son los “pretratamientos”, una línea especial para el cuidado del cabello. Los precios asustan a los consumidores, pues se ubican entre Bs 13.180 y Bs 14.198, lo equivalente a una semana de salario mínimo.
Una situación similar ocurre en la popular cadena de farmacias Farmatodo donde desde hace dos meses no llega este tipo de mercancía. “No hay jabón de baño, ni desodorante, ni mucho menos crema dental, eso no viene desde marzo”, comenta una de las trabajadoras del Farmatodo ubicado en Chacao que prefirió declarar bajo el anonimato.
Asimismo, relató que ayer de manera sorpresiva “llegó Shampú Head & Shoulders en Bs 8 mil y ya a las 10 de la mañana no había nada”.
Opciones
Ante la situación, diversos comerciantes chinos de la capital se han abastecido de estos productos. Sin embargo, la calidad es pésima, según relatan los consumidores quienes además se quejan por los altos costos. En un comercio asiático situado en la avenida San Martín, “hay de todo” pero “caro” y de poca calidad.
La crema dental “Colgore” tiene un valor de Bs 4.800 mientras que la “Cornnet” ronda los Bs 5.800. “Compré una pasta dental pero eso no sirve. Lo que uno tiene que hacer por necesidad”, manifestó Armando Nieve, cliente del establecimiento.
Los jabones de baño se consiguen en este local de diversos aromas: rosa, mandarina, limón y muchos más; cada uno cuesta entre Bs 2.200 y Bs 2.500. Además tienen panelas de jabón azul “sin marca” en Bs. 1.700.
De Champús también están surtidos, ofrecen el “Hair Shampoo” de tan solo 200 ml en Bs. 4.500.
En otra perfumería caraqueña expenden diferentes tipos de champú, los precios oscilan entre Bs. 4.157 y Bs. 8.500. Allí hay desodorantes pero en Bs. 3.500 y Bs. 3.610.
Cabe destacar que las tradicionales cremas de dientes “Colgate y Oral-B” quedaron para la historia; los únicos que las venden son los “bachaqueros”. En el mercado Guaicaipuro cuestan desde Bs. 15 mil hasta Bs, 20 mil.
Se las inventan
La escasez de artículos de aseo personal ha puesto a “parir” a más de uno. Viviana Sánchez, relata que los desodorantes que ha comprado recientemente han sido a “bachaqueros”, “Pagué por el último Bs. 5.500, es de bolita pero no es muy bueno”. Para bañarse tuvo que comprar jabones artesanales en Bs. 14 mil la docena a través de las redes sociales, “es horrible, sufro cada vez que se me acaba”, dijo.
Juana Gil, madre de familia cuenta que actualmente se pueden cepillar en su casa porque una amiga que viajó a Curazao y le obsequió una crema dental “Colgate” de lo contrario, no sabe cómo hubiera hecho.
Virgina Rodríguez, quien se encontraba en una perfumería de Caracas, sostiene que su familia aún tiene reservas de pasta dental y con eso han subsistido. “Con los jabones ha sido una tragedia, compré donde los chinos y me salió una irritación; ahora prefiero usar el jabón azul que por los menos se está consiguiendo”, expresa.
Roberto Torres, quien se dedica a hacer fotografías, ha pasado por situaciones similares, “En esta época de crisis he hecho de todo, me ha tocado comprar jabón líquido, me he duchado con gel de baño que lo odio, he tenido que recurrir hasta al jabón industrial que utilizan para desinfectar los instrumentos quirúrgicos, es increíble que algo tan básico se haya convertido en una agonía” lamentó.
2017-05-27