Dicen que pequeños cambios son grandes cambios, pero al pretender cambiar la historia no solo se atenta contra el acervo cultural de la ciudad sino con todo lo que ella representa. Las cosas son como son.
Pretender cambiar de un plumazo el escudo, la bandera y el himno de Caracas, solo denota el poco sentido de historia.
Somos quieran o no, el resultado de nuestra historia, sea buena, mala o regular, pero es la historia y un oficial de las Fuerzas Armadas debería saberlo, respetarlo e incluso sentirse orgulloso de ello.
Pretender reivindicar momentos de la historia cambiándolos, es negarlos; ejemplo, primero renombrar el día de la resistencia, eliminando el descubrimiento de América, y ahora sustituyendo al León de Caracas por (lo que el gobernante turno de la ciudad pretende entender) un grito reivindicativo de la historia.
Historia interpretada
Estimada alcaldesa, no es usted la llamada para interpretar la historia, tampoco para relatar como verdadera su versión de Caracas a las nuevas generaciones. La ciudad de Santiago de León de Caracas fue fundada el 25 de Julio 1567 por Don Diego de Losada; ocultar la realidad, pretender que Venezuela solo tiene 20 años y no 454 años de nada va a servir.
La historia, Alcaldesa, es la historia. Ahora, se dice que la historia es de los vencedores y le pregunto ¿vencedores de qué? Lo dije durante la campaña electoral por Caracas, los problemas de Caracas no son solo el agua, la basura, el transporte, la seguridad, los problemas de Caracas son todos ellos juntos. Estimada alcaldesa, los caraqueños merecemos que se ocupe de la solución de estos problemas.
Problemas históricos
Como tanto le gusta la historia, estos problemas son casi históricos… el problema del agua ¿Cómo piensa resolverlo? ¿Con cisternas de agua?… ¿La seguridad? ¿Contra las bandas criminales?… ¿La basura como la piensa recoger y adonde la va a enviar? ¿La va a reciclar? ¿Hay plantas de reciclaje activas?… ¿El transporte como lo va a solucionar? ¿Su costo? ¿Cantidad de unidades? ¿Rutas?
En fin, mejorar la calidad de vida de los caraqueños que es para lo que está usted ahí y no para cambiar la bandera, no para ocultar la historia donde nuestras nuevas generaciones tienen un punto de comparación; ni siquiera Guzmán Blanco, Falcón, Castro (me refiero Cipriano); ni luego de la guerra federal que presumo conoce, se atrevieron a intentar modificar el pasado histórico. Entiendo que no tenga logros que mostrar, pero tampoco es borrando lo anterior que aparece a algo nuevo.
Una invitación
La invito y a todos los que de una manera u otra hicimos campaña por llegar a la alcaldía que usted encabeza, para presentar programas y proyectos que solucionen los problemas y mejore la calidad de vida de los caraqueños. Tome esas ideas, reúnase con todos ellos y en consenso busque la solución de los problemas de Caracas.
Está bien que hagan concursos de pintura en los colegios y las escuelas de la ciudad, pero el resultado debe ser un premio y no pretender imponer su voluntad a un dibujo; a mi parecer, esa no es una actitud muy democrática.
Pero es que no es más que una bandera, que un himno y un escudo que solamente responde a su partido político.
Le recuerdo, que el resultado electoral pasado, la oposición sumada obtuvo 4 millones de votos y el oficialismo (es decir, su línea partidista) obtuvo 3 millones de votos.
El hecho que hayamos ido divididos por un problema que tenemos que resolver en la oposición no le da a usted la autoridad electoral o política para modificar la historia, entonces ¿Cómo se atreve hacerlo?.
Falta de sensibilidad caraqueña
Es que solamente alguien que no es de Caracas, que no siente a Caracas, ni conoce su historia se atreve a magno error.
La ciudad de Santiago de León de Caracas es mucho más que un nombre, el Ávila ahora “Waraira Repano” es mucho más que un nombre.
Venezuela, estimada alcaldesa es mucho más que 20 años y sigue en pie, los venezolanos seguimos en pie, seguimos buscando un futuro mejor, pero la única forma de lograrlo es en unidad y con propuestas, con voluntad de ser mejores cada día y que en nuestro querido país se resuelvan los inconvenientes uno a la vez y día a día.
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