Redacción 2001.com.ve
Fármacos como la prednisona y el cellcept, los cuales son inmunosupresores que evitan el rechazo de los órganos que han sido trasplantados, han desaparecido de las farmacias públicas y privadas desde comienzo de julio.
Cientos de pacientes no pueden suspender su consumo ni un solo día por el riesgo de perder el riñón o el hígado por el que esperaron por años.
El presidente de la Federación Farmacéutica, Freddy Ceballos, indicó: "Cuando se acabó la (prednisona) humana, empezó todo el mundo a buscar la canina".
Por su parte, Francisco Valencia, presidente de la fundación Amigos Trasplantados, expresó que “se está poniendo en riesgo la vida de las personas”. Asimismo, indicó que para apoyar a los pacientes a menudo les regala los medicamentos.
"Es humillante saber que tu vida depende de un medicamento para animales", explicó Kevin Blanco, un paciente que fue trasplantado hace 15 días.
De acuerdo con la Federación Farmacéutica, el desabastecimiento de medicamentos en Venezuela alcanza un 70%.
Con información de AFP
2015-08-07