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El mundo está en alerta por la propagación del nuevo coronavirus, una enfermedad que deja hasta el momento 83.652 contagiados en todo el planeta, 2.791 muertos en China y 67 fallecidos fuera de ese país.
Los gobiernos están implementando distintas medidas para hacerle frente a la cepa, y los aeropuertos y aerolíneas no se quedan atrás. Si bien la expansión de los viajes aéreos hizo del mundo un lugar mucho más pequeño y conectado, también facilitó la propagación de enfermedades, como se observa con el propio coronavirus, que apareció en distintos continentes.
La situación se complica por el hecho de que los viajeros pueden mostrar pocos o ningún síntoma, subir a un avión y estar en casi cualquier lugar del mundo en cuestión de horas.
Cuando se está dentro de un avión por un tiempo prolongado, los pasajeros pueden quedar “atrapados” al permanecer sentados junto a un pasajero enfermo durante todo el vuelo. Sin embargo, no se pierde la esperanza para los viajeros preocupados por su salud, ya que hay formas de evitar los gérmenes no deseados.
Aquí, algunos consejos para disminuir la posibilidad de contagio
1) Antes de llegar a los aeropuertos, los pasajeros deben asegurarse de que tienen todas las vacunas
Ciertos destinos requieren vacunas o medicamentos para enfermedades (como la malaria por ejemplo) pero incluso una vacuna contra la gripe puede ayudar a su cuerpo a defenderse, afirmó el doctor Scott Weisenberg, director de medicina de viaje de NYU Langone Health, en diálogo con Business Insider.
Vacunarse adecuadamente ayudará a evitar contraer una enfermedad infecciosa que debilitaría el sistema inmunológico y podría conducir a la contracción de otras enfermedades, como el coronavirus.
2) Lavarse las manos con agua y jabón es una gran medida preventiva
“Lávese las manos y evite tocarse la cara y los ojos”, afirmó el doctor Salvatore Pardo, responsable de emergencias del Hospital Jewish Valley Stream, de Long Island, en conversación con el medio citado.
Esta práctica es una forma fácil de evitar que los gérmenes que tocan nuestras manos lleguen a nuestras membranas mucosas. El desinfectante de manos, como el alcohol en gel, también es una alternativa valiosa, dicen los expertos.
Los pasajeros también deberían encargarse de llevar toallitas desinfectantes en sus vuelos, recomienda el doctor Pardo.
Las aerolíneas emplean personas de limpieza para asegurar que los aviones queden completamente desinfectados pero un retraso en el vuelo o la presión ejercida sobre el personal del aeropuerto para asegurar que los vuelos salgan a tiempo significa que a veces los aviones no reciban toda la limpieza que necesitan.
“Si puede llevar una toallita desinfectante a bordo para limpiar el área de los asientos a su alrededor, hágalo”, agregó Pardo.
3) Evitar estar cerca de personas con estornudos o resfríos
“Manténgase alejado de las personas que tosen o muestran cualquier otro signo de enfermedad respiratoria”, sostuvo al Business Insider el doctor Bernard Camins, director médico para la prevención de infecciones del Sistema de Salud del Monte Sinaí.
Aunque la mayoría de los pasajeros no pueden alquilar fácilmente aviones privados, pueden elegir asientos lejos de otros pasajeros. “Para la gripe, se considera que el contacto cercano es de tres pies. Para el nuevo coronavirus, el contacto cercano se considera de seis pies (1.82 metros)”, según el doctor Camins.
El pasillo es frecuentemente atravesado por personas que van al baño, asistentes de vuelo y simples portadores potenciales de gérmenes. Esto significa que es mejor evitarlo. En cambio, el asiento de la ventana, en la mayoría de los aviones, es a menudo el más alejado del pasillo, lo que da un mínimo de protección contra los gérmenes.
4) Conseguir una fila entera para uno mismo sería ideal
Si se puede reservar un asiento en una fila en solitario es mucho mejor. “El principal riesgo es la gente en las filas (y asientos) a tu alrededor”, enfatizó el doctor Pardo. La mejor manera es preguntar a su agente de puerta de embarque cuando llegue a su puerta.
El mapa de asientos de un vuelo tiende a confirmarse a medida que se acerca el embarque, ya que es entonces cuando la aerolínea evaluará quién estará realmente en el vuelo. En el tiempo que transcurre entre la facturación y el embarque, el mapa de asientos puede cambiar, ya que los pasajeros pierden las ventanillas de facturación, los viajeros de élite obtienen un ascenso de categoría y los planes de viaje cambian en función de los retrasos o las cancelaciones.
Preguntar al agente de la puerta de embarque si se ha abierto algo o no puede dar mejores resultados y más actualizados que comprobar el mapa de los asientos en el mostrador de facturación al llegar al aeropuerto. Sin embargo, el mapa de asientos no está confirmado al 100% hasta que se cierra la puerta de embarque.
5) Trate de evitar ir al baño
“Evite las áreas de alto contacto, como los baños”, recomendó el doctor Weisenberg a Business Insider.
También hay que tener cuidado cuando se toca las manijas de las puertas, por ejemplo, dado que son espacios de mucho contacto. Apenas se cierra o abre una puerta se debe desinfectar las manos, piden los médicos.
6) La mejor mascarilla
“Actualmente, las máscaras N95 son las mejores para protegerse contra la mayoría de los gérmenes”, afirmó Pardo. Pero eso no significa que deban usarse siempre, aclaró. “A menos que se esté en un centro de salud, una mascarilla sólo debe ser usada por alguien que tenga síntomas de una enfermedad respiratoria o si se va a estar en contacto cercano con alguien con la nueva infección de coronavirus”, agregó el doctor Camins.
7) La importancia del aire acondicionado
La queja más común de los viajeros es el aire acondicionado en los aviones pero, según los médicos consultados, puede en realidad hacer más bien que mal. “La mayoría, si no todos los aviones comerciales modernos, tienen filtros HEPA que filtrarán el aire”, dijo Camins.
La mayoría de los aviones cuentan también con rejillas de ventilación sobre cada asiento para dispensar este aire limpio directamente a los pasajeros.
8) Beber más agua cuando se vuela
Beber agua, en lugar de bebidas alcohólicas o cafeína, ayuda a mantener las defensas contra posibles gérmenes.
“La deshidratación puede contribuir a un sistema inmunológico débil. No intente hidratarse con bebidas alcohólicas o con cafeína… Eso contribuirá a la deshidratación”, dijo el doctor Pardo.
Pedir agua también ayuda mucho a mantener un sistema inmunológico fuerte cuando se vuela y evitar que las valiosas membranas mucosas se sequen.
9) El avión en el que viajas influye
Deben elegirse los aviones más nuevos en lugar de los más antiguos si un viaje en particular permite esta opción. “La baja humedad (de la cabina) secará las membranas mucosas (ojos, nariz, boca), lo que hará que sea menos eficaz para bloquear el virus”, dijo Pardo.
Los aviones estándar tienen una presión de altitud de cabina de unos 8.000 pies donde los niveles de humedad son bajos. Los aviones ultramodernos, como el Boeing 787 Dreamliner y el Airbus A350 XWB, cuentan con una tecnología que reduce la presión de la altitud de la cabina de un avión a unos 6.000 pies, lo que permite mayores niveles de humedad.
Estos aviones se encuentran principalmente en rutas de larga distancia, pero deben ser favorecidos sobre los aviones más antiguos para ayudar a dar al cuerpo una mejor oportunidad de combatir posibles enfermedades.
10) Nuestros cuerpos pueden combatir las enfermedades mientras dormimos
Los viajeros no deberían evitar dormir en los aviones por temor a que el sistema inmunológico no trabaje tan duro para combatir posibles enfermedades. “Dormir es bueno para su salud en general… Yo no desanimaría a la gente a dormir”, dijo el doctor Weisenberg.
El cuerpo trabaja igual de duro para combatir las enfermedades incluso cuando estamos dormidos, pero aún así se deben tomar precauciones si se decide dormir cerca de alguien que está tosiendo o estornudando.