La ministra chilena de Bienes Nacionales, Marcela Sandoval, explicó las razones por las que el Gobierno desistió de comprar la residencia del expresidente Salvador Allende (1970-1973) en Providencia, tras desatarse una polémica por los 933 millones (unos 915.000 dólares) acordados para la compra del inmueble del que la actual ministra de Defensa y nieta del exmandatario, Maya Fernández, es copropietaria.
“Acá en estos trámites hay distintas etapas (...) Estamos recién en una etapa muy inicial que es el decreto de toma de razón por parte de la Contraloría General de la República con el que se inicia la autorización de la adquisición de la residencia. Esto no significa en ningún caso finalizar un trámite, como muchos leyeron por ahí”, afirmó Sandoval anoche, en referencia al comunicado difundido por su propia cartera hace unos días, anunciando la adquisición de la propiedad.
"Es importante hacer esta pedagogía, porque los trámites de adquisición de cualquier inmueble para el catastro del Fisco requieren de varias etapas y se inician con un decreto que toma razón en la Contraloría, pero también hay varias etapas intermedias y culmina con un decreto que es aprobatorio. Eso hoy día no está sobre la mesa y con el único proyecto que vamos a continuar es con la ex residencia del mandatario (Patricio) Aylwin”, detalló la ministra.
A fines de 2024, el Gobierno chileno difundió el inicio de trámites para adquirir las residencias dos propiedades contiguas en las que vivió el expresidente Patricio Aylwin (1990-1994), ubicadas en calle Arturo Medina 3678 y 3684; y de la residencia que habitó el expresidente Allende, en Guardia Vieja 392, todas en la comuna de Providencia, en la zona oriental de la capital chilena.
En un comunicado difundido por Bienes Nacionales, se argumentó la acción para "conservar y difundir el legado" de estos exmandatarios.
Consultada por si el Ejecutivo reconoce un error al anunciar la compra del inmueble, Sandoval señaló que “lo más importante es poner en valor la memoria de los expresidentes elegidos democráticamente y acá hubo una decisión de parte del gobierno, de ministerios como el nuestro, de llevar adelante estos procesos y de que, después, fueran conducentes a proyectos de memoria histórica, culturales y acá lo más importante es que cada etapa se evalúa en su mérito legal”.
"Hoy estamos tomando una decisión porque, si comparamos ambos procesos, hoy día estamos en condiciones de decir con la familia Aylwin podemos continuar con la adquisición de esta residencia, porque hoy día no vemos ningún reparo. En cambio, hoy sí consideramos que en la actual condición de la comunidad de herederos de la familia Allende, no podemos continuar con la adquisición de esta residencia”, subrayó la ministra.
Con información de EFE
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