Las autoridades turcas han liberado este martes a 55 refugiados iraquíes que llevaban seis días atrapados en un contenedor que iba a ser embarcado en el puerto turco de Aliaga en un barco con rumbo a Italia.
Los refugiados habían pagado altas sumas de dinero a traficantes de personas para trasladarse a Italia en el buque de carga; pero tras seis días en el interior del contenedor empezó a faltarles el aire; ya que los agujeros de ventilación eran insuficientes, informa hoy el diario turco Cumhuriyet.
Por ello, empezaron a hacer ruido y pedir ayuda a gritos, lo que alertó finalmente a las autoridades, que acudieron a liberarlos.
Los 55 ciudadanos iraquíes, que tenían señales de agotamiento, pasaron un control de salud y fueron enviados a un centro de internamiento de extranjeros; mientras se iniciaron tareas para dar con los traficantes.
En la costa oeste de Turquía operan numerosos delincuentes que llevan a refugiados y migrantes a las cercanas islas griegas; a menudo poniendo en riesgo su vida al llenar al máximo las frágiles lanchas neumáticas; pero también se han dado otros casos de utilizar buques cargueros para emprender rumbo a Italia.
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