La noche del 29 de julio del 1967 a las 8:05 PM se registró un evento sísmico de 6,5 en la escala de Richter que duró 35 segundos y dejó 263 muertos. 55 años después de tal desastre natural, este se considera uno de los terremotos más grandes en la historia del país.
Debido a que los temblores no se pueden predecir, es necesario conocer si las viviendas están en condiciones óptimas para resistir cualquier movimiento telúrico.
El ingeniero civil, Gianfranco Russo, explicó que lo fundamental a la hora de construir es la base de la edificación y el suelo donde este es levantado. “Quienes están a cargo del proyecto deben verificar que los planos concuerden con todo lo que corresponde a las medidas”, detalló.
De tal manera explicó que los cálculos siempre van a estar 20 o 30 % por encima de lo estimado, siendo calculados a un factor sísmico de 7 y 8, debido a que es la normativa que se maneja en Venezuela.
El consultado señaló que la base debe ser loza corrida y el suelo tiene que estar muy bien asentado, para evitar que en caso de un sismo se desnivele y quiebre.
Russo compartió que las estructuras de concreto llevan cabillas y tubos estructurales de cemento, lo que ayuda a que resistan de las flexiones del sismo.
En aquellas zonas que son consideradas altamente sísmicas, como Caracas, las estructuras no deben ser mayor a tres pisos. El ingeniero civil destacó que cuando se trata de una edificación alta, las columnas y vigas son mucho más altas en los primeros pisos, puesto que a medida que los pisos suben comienza a afectar la carga de viento y no tanto la carga sísmica.
Se debe construir bajo los protocolos sismorresistentes
Esteban Tenreiro, ingeniero estructural, destacó que en construcciones con gran peso en el último piso de las edificaciones, el ingeniero se ve en la tarea de buscar los materiales de mejor calidad, ser más estricto con la estructura y la fuerza que se le aplica. “Nosotros nos encargamos de configurar una estructura que sea sismorresistente”, compartió.
El arquitecto Carlos Myers, quien forma parte de DiArq7, organización que se encuentra en la conmemoración de la Semana del Arquitecto, resalta que se debe evaluar la data de la edificación para saber si fue diseñada en los años que salieron las normas sismorresistentes.
Además se debe evaluar el suelo, los materiales y la estructura de cada construcción, sea alta o pequeña.
En este sentido, compartió que las zonas de la capital que son consideradas “las más sísmicas” son Altamira y Los Palos Grandes, zona que también fue de las que más sufrió desastres para el terremoto del 67, debido a que sus edificaciones no contaban con las normas y fueron diseñadas con estructuras de una sola dirección.
Para mantenerte informado de todo lo que acontece en el ámbito nacional e internacional sigue nuestro canal en Telegram https://t.me/Diario2001Online