HEILIS ORIANA GONZÁLEZ. M | [email protected]
El secretario general de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Amalio Belmonte, expresó que el inicio de clases depende mucho de la plataforma disponible y no solo de la propia universidad, sino también de los profesores, los estudiantes.
“El problema está que toda alternativa online, además que es limitada en sí misma, no importa que uno disponga de recursos, siempre es limitada, también está sujeta a la situación nacional que en nuestro caso el sistema eléctrico nacional tiene falla e internet tiene fallas. Y por otra parte, las condiciones de los profesores y de los alumnos no son las mejores", dijo el académico.
Indicó que "la alternativa online paradójicamente, hace mucho menos justa la sociedad, porque no todos disponen de formas de comunicación con las nuevas tecnologías que sobre las cuales descansa".
LA CASA QUE VENCE LA SOMBRA.
Belmonte mencionó que "la situación de la UCV no es diferente a las demás universidades. Nosotros no disponemos de una plataforma suficientemente robusta porque es muy costosa y la que tenemos la estamos utilizando de la mejor manera, tenemos planes, educación online, pero a pesar de esas limitaciones, no podemos decir que tenemos las condiciones para desarrollarla totalmente".
Señaló que "hay algunas escuelas, algunas facultades que han planificado opciones online en la medida de sus posibilidades y de la naturaleza de los estudios. Porque son diferentes los perfiles de la facultad entre agronomía y la facultad de humanidades y educación, hay diferencia entre medicina en la facultad de ciencias jurídicas y políticas. Entonces va a depender mucho de la naturaleza de cada facultad y de las condiciones globales del país".
El profesor informó que "el ingreso de nuevos estudiantes con las distintas modalidades, está condicionado a la pandemia que retraso los años y semestre. Incluso hay todavía estudiantes del 2019 que no han culminado el proceso de inscripción hay semestres que no han terminado. Lo cual hace que pospongamos el inicio para los nuevos".
Aseguró que "las inscripciones de los nuevos se van a hacer, no importa la manera como ingresaron a partir del momento en el cual podamos terminar la del 2019. Estamos en ello y obviamente el inicio va a estar condicionado a la culminación de los semestres en ejecución".
Asimismo dijo que "el problema está en que ya existían limitaciones previo a la pandemia, a las limitaciones de transporte y limitaciones de Internet, limitaciones de energía eléctrica en el país. Entonces ya eso estaba condicionando el desarrollo de las actividades. La pandemia lo que hizo fue multiplicar la situación de carencias que tienen las universidades, especialmente la UCV. Todo está obviamente diferido, retardado por circunstancias ajenas a la propia universidad".
DECEPCIONADOS.
María Uzcátegui, estudiante de 4to año de derecho en la Universidad central de Venezuela, destacó que “en cuanto a las universidades públicas, las únicas que medianamente dieron continuidad y por órdenes del Ministro de Educación Universitaria, sin un diagnóstico real de la situación de los estudiantes y profesores, fueron las Universidades creadas por el Ejecutivo Nacional. Sin embargo, no fue el caso de las universidades autónomas pues decidieron unánimemente “no continuar el año académico hasta tanto no se estabilicen los casos de contagio por Covid-19”, cosa que, a mi juicio, ello no era motivo para paralizar por completo la educación en el país, pues bien se podía avanzar dependiendo de acuerdos estudiante-profesor para el mismo, cosa que no se tomó en cuenta en ningún momento”.
Uzcategui añadió que “tal es la situación que vive ahora en la Universidad Venezolana que, además de tener que soportar que la devastación de las instalaciones por parte de grupos antisociales, también tenemos que padecer la indolencia e intolerancia de las Autoridades universitarias que simplemente decidieron no tomar en cuenta la modalidad virtual para la continuidad de las clases, alegando que “las clases virtuales es dar muerte a la academia”, cuando son ellos quienes la destruyen a diario impidiendo la continuidad del año académico, y no solo eso, sino que por su irresponsabilidad y falta de compromiso para con la institución los estudiantes sentimos que la Universidad se nos viene abajo”.
La estudiante manifestó que “nuestro rol como dirigentes estudiantiles es trabajar en beneficio de los estudiantes, los que nos eligieron para representarlos frente a las autoridades, pero en muchas ocasiones nuestras voces son minimizadas y hasta ignoradas frente al poder de aquellos quiénes no tienen voluntad de resolver nuestros problemas. No obstante, ello no será razón para nosotros callar, seguiremos denunciando todas las arbitrariedades de las autoridades y trabajando por los estudiantes”..
2020-10-06
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