Este jueves 5 de enero, un avión de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) recibió múltiples disparos en el aeropuerto de Culiacán, estado de Sinaloa.
Esto tras la detención del narcotraficante Ovidio Guzmán, considerado uno de los líderes del Cártel de Sinaloa e hijo de Joaquín Chapo Guzmán Loera.
Los pasajeros de un vuelo de Aeromexico tuvieron que tirarse al suelo ante la balacera que se registró, reseñaron medios locales.
Ante ello, pasajeros y la tripulación fueron descendidos de la aeronave para ponerlos a salvo, mientras que la unidad aérea permaneció estacionada en la posición 10 de Aviación Comercial.
Además, en redes sociales sociales se viralizó la grabación donde se escuchan ráfagas de armas de fuego que iban dirigidas al avión de la Fuerza Aérea Mexicana.
Aeroméxico confirmó el ataque en Culiacán
Del mismo modo, y a través de un comunicado de prensa, Aeroméxico confirmó el ataque perpetrado en contra del equipo tipo Embraer 190 durante el inicio de su carrera de despegue.
Asimismo, el daño en la parte trasera del fuselaje, así como en el sistema hidráulico.
El hecho se dio a conocer horas después que la compañía notificara de la cancelación de todos sus vuelos con destino u origen a Culiacán.
Por su parte, la embajada de Estados Unidos en México solicitó a los ciudadanos estadounidenses no viajar a Sinaloa.
Esto ante las balaceras en Culiacán que se extendieron a Los Mochis y Guasave.
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