EFE
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, iniciará mañana una visita oficial de tres días a Washington en la que buscará sentar las bases de un nuevo acuerdo de cooperación bilateral después de 15 años de aplicación del Plan Colombia de lucha contra el narcotráfico.
Santos viajará en la tarde de hoy con una comitiva que incluye a varios de sus ministros, y entre miércoles y viernes mantendrá reuniones con el presidente estadounidense, Barack Obama, y con los principales funcionarios de su Gobierno, así como con empresarios y organismos internacionales.
Para el mandatario colombiano esta visita será una oportunidad de revisar la agenda entre dos "socios estratégicos" en un momento de mucha importancia para ambos países pues coincide con los 15 años del Plan Colombia, la posible firma de la paz en las negociaciones con las FARC y con el último año del Gobierno de Obama.
Mediante el Plan Colombia, un acuerdo bilateral para la paz y el fortalecimiento del Estado, EE.UU. destinó a lo largo de estos 15 años cerca de 9.000 millones de dólares en ayuda, principalmente militar, para la lucha contra las drogas con el fin de ayudar a terminar el conflicto armado del país andino.
Esta estrategia es considerada un éxito por ambos Gobiernos, y diversos analistas consideran que, si bien no logró acabar el problema de las drogas en Colombia, sí ayudó al fortalecimiento del Estado hasta el punto de que si las FARC están hoy negociando la paz con el Gobierno es gracias al Plan Colombia.
Por esa razón el Gobierno colombiano espera que en esta visita se pueda abrir un nuevo capítulo en la cooperación contra las drogas mediante una estrategia que dé continuidad al Plan Colombia pero en otros moldes, no tan centrado en el componente militar sino en la seguridad y el apoyo a la paz mediante la inversión social, sin dejar de lado el componente antidroga, según Santos.
Una de la fortalezas del Plan Colombia es que ha tenido apoyo total de ambos países, pues tanto demócratas como republicanos lo han apoyado en el Congreso y ha tenido continuidad con gobiernos de diferente signo, tanto en Washington como en Bogotá, convertido en una auténtica política de Estado en Colombia.
A la celebración han sido invitados los expresidentes de ambos países que tuvieron que ver con esta iniciativa, Bill Clinton y Andrés Pastrana, que firmaron el acuerdo en el año 2000 y George W. Bush y Álvaro Uribe.
Hasta ahora solo Pastrana ha confirmado su asistencia al acto conmemorativo que tendrá lugar en la Casa Blanca.
Santos, que viaja en compañía de los ministros de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín; Defensa, Luis Carlos Villegas; Hacienda, Mauricio Cárdenas, y Comercio, Industria y Turismo, Cecilia Álvarez-Correa, iniciará mañana sus actividades con un almuerzo con empresarios en la Cámara de Comercio de Estados Unidos.
Posteriormente se reunirá con el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan y con los líderes partidistas, tras lo cual inaugurará la nueva sede diplomática de Colombia en la capital estadounidense, y por la noche asistirá a la presentación de "Delirio", un espectáculo musical de salsa y baile.
El jueves el mandatario desayunará con el vicepresidente estadounidense, Joseph Biden, luego depositará una ofrenda floral en la Tumba del Soldado Desconocido en el Cementerio Militar de Arlington y se reunirá con los senadores Mitch McConnell (republicano) y Harry Reid (demócrata), líderes de sus bancadas.
Ese mismo día se reunirá con el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, tras lo cual acudirá a la entrevista con Obama, seguida de la celebración de los 15 años del Plan Colombia.
El viernes, último día de su visita, Santos de reunirá con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, y participará en un foro de ese organismo sobre los retos y oportunidades del posconflicto en Colombia.
También se entrevistará con el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, y cerrará su agenda con una reunión con la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde.
2016-02-02