Millones de hogares en Estados Unidos que dependen del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) enfrentan una nueva realidad económica tras el fin de los fondos extraordinarios aprobados durante la pandemia y extendidos en varios estados.
A partir del 1 de noviembre de 2025, gran parte de los estados finalizaron el financiamiento adicional destinado a mitigar los efectos de la inflación y los altos costos de vida.
Esta medida, tomada por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), significa que muchas familias dejarán de recibir depósitos mensuales de refuerzo, lo que representa un importante cambio en el presupuesto alimentario.
Pese a este ajuste, es fundamental que los beneficiarios conozcan las reglas vigentes sobre el saldo ya acreditado en sus tarjetas EBT, ya que el dinero no se pierde inmediatamente según informa El Cronista.
Cómo cuidar los fondos
El dinero que los beneficiarios aún conservan en sus tarjetas EBT sigue siendo válido, pero su permanencia depende de la actividad constante de la cuenta.
El USDA establece que, para proteger el saldo, los usuarios deben realizar al menos una compra de alimentos elegibles dentro de un período de nueve meses consecutivos.
Si una cuenta no registra ninguna transacción durante ese plazo, el sistema la marca como inactiva y elimina automáticamente los fondos restantes.
Para evitar la pérdida de estos beneficios esenciales, los expertos recomiendan realizar al menos una compra mínima autorizada, ya que esta acción reinicia el conteo de nueve meses.
Además, el USDA aconseja a los usuarios consultar regularmente su saldo a través del portal oficial de su estado o contactar al servicio EBT. Recuerde siempre que los beneficios son personales y no pueden usarse para adquirir productos no alimentarios, alcohol o tabaco.
Visita nuestra sección: Servicios
Mantente informado en nuestros canales de WhatsApp, Telegram y YouTube