Paola Ñáñez/ EFE
Terroristas de llamado Estado islámico mantienen a 13 personas en situación de rehenes en una cafetería de Sydney, Australia.
Las autoridades australianas han cerrado el espacio aéreo sobre la ciudad.
Una bandera del grupo extremista ha sido puesta en la ventana del café donde los militantes tienen los rehenes.
Un hombre de 40 años, con rasgos árabes y barba, ha sido identificado por los medios como el supuesto secuestrador de 13 personas en Sydney.
Imágenes presentados por un canal local muestran a un presunto secuestrador con ropa negra, un morral y un goroo con lo que parecen inscripciones árabes.
Un testigo del hecho afirmó "fuí a la panadería, pero la puerta estaba cerrada. Nunca está cerrada. Me fijé y vi gente sentada en el suelo y un hombre con gorra y barba andaba entre ellos".
Según el experto en seguridad del Instituto tecnológico de Melbourne, Joe Siracusa, el secuestrador iba a alguna parte en la zona donde se encuentra el Banco de la Reserva o el Parlamento de Nueva Gales del Sur, le vieron y decidió refugiarse en el café.
"Le ha tocado un mal día y no sabe qué hacer ahora. Suceda lo que suceda sabe que le han atrapado, así que estará desesperado", señaló.
El primer ministro de Australia se pronunció
El primer ministro de Australia, Tony Abbott, expresó hoy su cautela al referirse al secuestro en una cafetería en el centro de Sídney.
"Desconocemos sus intenciones o si es un incidente con motivaciones políticas, a pesar de que hay indicadores que apunta a ello", declaró Abbott en una breve comparecencia de prensa en la que evitó pronunciar la palabra "terrorismo".