La Iglesia Católica de Bolivia alertó hoy que habrá más tensión en los próximos días en la protesta por pensiones que desde hace 13 días lidera la unitaria Central Obrera Boliviana (COB).
El temor de la Iglesia Católica aumentó porque el gobierno de Evo Morales instó a sus seguidores a defender en las calles el actual proceso de cambio en Bolivia.
Los grupos leales al mandatario indígena preparan para la próxima semana movilizaciones callejeras denominadas "contramarchas" para neutralizar las diarias marchas obreras en ciudades del occidente y oriente de Bolivia.
"Los anuncios de radicalización de medidas de presión y convocatoria de nuevas movilizaciones pueden derivar en la confrontación entre hermanos bolivianos", alertó la Iglesia Católica de Bolivia.
La Conferencia Episcopal Boliviana, a través de monseñor Edmundo Abastoflor, reiteró hoy que el diálogo "es el único camino válido y democrático", e instó al gobierno y sindicatos a reanudar la negociación sobre cambios en una polémica ley de pensiones.
La presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia, Yolanda Herrera, criticó a militantes del Movimiento Al Socialismo (MAS), partido político de Evo Morales, por convocar las contramarchas.
"Es perverso querer buscar soluciones a través de la confrontación de bolivianos contra bolivianos", dijo.
Los sindicatos obreros piden una renta mensual con un 100 por ciento sobre las últimas 24 papeletas de pago, pedido rechazado por el gobierno, que planteó una renta máxima de 4.000 bolivianos (574 dólares) y una renta mínima de 1.200 bolivianos (172 dólares).
La huelga general con corte de rutas provocó la destrucción de un puente en la carretera que une La Paz y Cochabamba por la explosión de una carga de dinamita activada por trabajadores de la mina Huanuni, el mayor yacimiento de estaño de Bolivia./DPA