El gobierno de México puso en marcha hoy en el violento estado de Michoacán una estrategia de seguridad con mando único y acciones sociales que será el primer ensayo a nivel nacional del plan anticrimen del presidente Enrique Peña Nieto.
Todas las agencias federales de seguridad y las corporaciones estatales trabajarán en conjunto bajo el mando único del ministro de la Defensa, Salvador Cienfuegos, según se anunció en la ciudad de Morelia, 300 kilómetros al oeste de Ciudad de México, al término de una reunión del gabinete de seguridad.
El Ejército no sólo hará patrullajes para proteger a la población y garantizar el libre tránsito, sino que también brindará atención médica y odontológica y ayudará a recuperar centros de salud y escuelas para tener una relación más cercana con la gente.
Además se designó al ministro de desarrollo agrario, territorial y urbano, José Carlos Ramírez Marín, como representante especial del gobierno para dar seguimiento a acciones para impulsar el desarrollo.
Michoacán, estado natal del ex presidente Felipe Calderón (2006-2012), fue el lugar elegido también por el anterior gobierno para poner en marcha su estrategia de seguridad, que consistió básicamente en una masiva movilización de militares y policías federales.
El ministro de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, indicó que "sí hay una gran diferencia entre lo que se dispuso (entonces) y lo que se va a hacer".
"Primero, hay un mando único, hay una estrecha coordinación de todas las fuerzas de seguridad, tanto federal, estatal, con los municipios, y un sistema de inteligencia que nos permite ir más allá", indicó.
"Pero fundamentalmente esperamos que los resultados sean también muy diferentes", dijo. "Vamos por el objetivo de devolver la paz a los michoacanos y respaldar políticas públicas para el desarrollo"
En Michoacán la violencia del crimen organizado se disparó en los últimos años por rivalidades entre organizaciones del narcotráfico como Los Caballeros Templarios, La Familia Michoacana y Los Zetas, extorsiones y ataques contra productores agrícolas y empresas.
Además, desde febrero empezaron a aparecer en distintas poblaciones las autodenominadas "policías comunitarias", formadas por civiles armados que, según el gobierno mexicano, en algunos casos son en realidad impulsadas y financiadas por grupos del crimen organizados.
Cienfuegos afirmó que no se permitirá que ningún civil porte armas e indicó que, desde el domingo, soldados han llegado a comunidades en las que se habían instituido estas "autodefensas" para asumir la seguridad. Después de una sorpresa inicial de los pobladores, se está avanzando "muy bien", dijo el militar.
Osorio Chong aseguró que el gobierno federal no se retirará de Michoacán hasta que estén dadas "las condiciones de paz y seguridad" y el gobierno local esté en condiciones de continuar el trabajo.
Como parte de la estrategia, se hará una "inversión importante" para establecer un cuartel del Ejército en el sur del estado y se respaldará a las autoridades locales para formar un cuerpo policial eficiente y capacitado y establecer un centro de atención de emergencias.
El ministro de Gobernación, que no reveló cuántos soldados y policías se desplegarán en la zona, dijo que la nueva estrategia no contempla pactar con organizaciones criminales. "No hay tregua ni pacto con el crimen", afirmó.
El gobierno de Peña Nieto, que asumió el 1 de diciembre, ha puesto en marcha reuniones regionales de seguridad con autoridades de distintas partes del país, pero hasta ahora no había lanzado de manera específica una estrategia para un estado. /DPA