Pedro León Zapata, quien falleció este 6 de febrero de 2015, fue prolífico no sólo en el oficio de la caricatura, sino también fue un pintor con una vasta obra.
Nacido en La Grita, Estado Táchira, el 27 de febrero de 1929. Se trasladó a México en su juventud para ingresar al Instituto Politécnico Nacional de México, donde se especializó en muralismo. En el país azteca fue cercano al taller de David Alfaro Siqueiros.
De sus diez años en México quedó una huella indeleble que se ve en toda su obra.
A su regreso a Venezuela, fue profesor de la Escuela de Arquitectura de la UCV y de la Escuela de Artes Plásticas Cristóbal Rojas.
Recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas en los años 80s. Y en 1999 culminó su obra más memorable: el mural Conductores de Venezuela, que cubre 1.500 metros cuadrados de superficie al norte de la Ciudad Universitaria de Caracas.
En entrevista concedida a José María Varona en 1997, Zapata se confesó pintor, antes que caricaturista: “Mi pensamiento es de pintor, porque es lo único que verdaderamente he hecho toda mi vida”. Si bien el artista tenía muy claro la división de ambos roles.
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