La explosión de Lamine Yamal está suponiendo una mina de oro para el Barcelona. En todos los sentidos. El extremo catalán ha deslumbrado al fútbol mundial, por su temporada en el club culé y por su rendimiento en la selección durante la Eurocopa, y se ha convertido en un activo que el Barça no duda en explotar.
Lamine es el futbolista del que se venden más camisetas, y un gancho para cerrar incorporaciones. Lo está siendo en las negociaciones con Nico Williams.
El Barcelona encontró un filón con el surgimiento de Lamine Yamal. El futbolista culé, al que el Barça ató en octubre hasta 2026 y blindó con una cláusula de mil millones, es un recurso habitual en las redes sociales de la entidad y su presencia en la plantilla azulgrana permite cerrar mejores negociaciones: es uno de los profesionales más demandados y codiciados del mundo.
Pero, además, Lamine Yamal también se ha convertido en una herramienta importante en las negociaciones meramente deportivas. El Barça tiene como prioridad este verano la incorporación de Nico Williams.
Más allá de estar en disposición de abonar los 58 millones de su cláusula al Athletic, el Barcelona debe convencer al atacante. Y ahí la presencia del canterano culé también está resultando muy beneficiosa.
Lamine Yamal y Nico Williams se han convertido en grandes amigos durante la Eurocopa. En el torneo de selecciones en Alemania estrecharon su vínculo y mantienen una gran relación.
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