Los gobernantes europeos exageran su ofensa por el espionaje estadounidense pero aún así Washington debería atender sus preocupaciones, indicó hoy un editorial del diario "The Washington Post".
"La trifulca entre Estados Unidos y Europa por las revelaciones de las actividades clandestinas de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) está aplacándose tan rápido como se encendió", sostuvo el artículo.
El presidente estadounidense," Barack Obama inicialmente empeoró las cosas con su comentario, en una conferencia de prensa en África, de que los servicios de inteligencia europeos probablemente trataban de espiar el menú de su desayuno", añadió.
Luego Obama habló con la canciller de Alemania, Angela Merkel, por teléfono "lo cual produjo una promesa conjunta de consultas a alto nivel".
"A pesar de las amenazas implícitas del presidente de Francia, Francois Hollande, no habrá demoras en el comienzo de las conversaciones para un tratado comercial transatlántico", señaló el diario.
"Pero sería un error confundir la calma superficial con un arreglo fundamental", continuó el editorial. "La opinión pública europea sigue inquieta por la perspectiva, real o imaginada, de una vigilancia estadounidense en las comunicaciones telefónicas e internet".
"Dado que los dirigentes europeos responden a la opinión pública, y dado que probablemente saldrán más cosas del cofre de documentos del excontratista de la NSA Edward Snowden, es probable que esto nos sea lo último que escuchemos acerca de este asunto", advirtió "The Washington Post".
Según el diario, "ha habido mucho teatro político en las protestas europeas y un teatro más bien hipócrita".
"En cuanto a las quejas europeas por la vigilancia estadounidense de las telecomunicaciones, en gran medida proceden de los opositores políticos de Merkel en Aelmania y otras partes, que vieron en esto una oportunidad de debilitar su campaña por la reelección en septiembre".
Y, añadió, "esas quejas perdieron fuerza cuando el jueves pasado (el diario francés) ‘Le Monde’ reveló que los servicios de inteligencia de Francia almacenan grandes cantidades de metadatos telefónicos y de internet, tal como lo hace la NASA". EFE