Puerto Rico anunció hoy, un día después de que S&P rebajara su calificación crediticia a bono "basura", que recortará un 2 % el gasto de todas las agencias (ministerios) de la isla, donde este miércoles se multiplicaban los llamados a la unidad política, las acusaciones y las propuestas.
El gobernador Alejandro García Padilla también presentó hoy la legislación para reducir un 20 % el déficit previsto para este ejercicio fiscal, que acabará el 30 de junio, y ordeno acelerar la renegociación de la deuda con vencimiento más próximo.
Eliminar entes públicos, recortar jornadas, vacaciones y beneficios entre los funcionarios y subir el impuesto sobre ventas y uso (IVU), son otras opciones que el Gobierno baraja para hacer frente al nuevo panorama que deja la degradación de la calificación de la deuda al grado especulativo.
De forma más inmediata, Puerto Rico tiene que pagar 900 millones de dólares de varios préstamos, aunque "estamos logrando el pago a plazos", apuntó García Padilla.
Desde fuera del Gobierno hoy se escuchaban propuestas tan diversas como reducir el número de municipios (son 78 para 3,5 millones de habitantes), dejar de pagar la deuda, buscar financiación en Latinoamérica, pedir ayuda a Washington o impulsar de una vez la anexión a EE.UU.
Y es que, según reconoció el secretario del Departamento de Desarrollo Económico, Alberto Bacó, "faltó creatividad, innovación y rapidez en la creación de un nuevo modelo económico" para una isla que lleva siete años en recesión y décadas endeudándose, hasta alcanzar los 70.000 millones de dólares.
"Si bien estamos decepcionados, seguimos comprometidos con la implantación de nuestros planes fiscales y de desarrollo económico. Creemos que la comunidad inversora reconocerá oportunamente el impacto positivo de las reformas", dijo la secretaria de Hacienda, Melba Acosta.
Insistió en que Puerto Rico tiene liquidez para acabar el año fiscal y adelantó que hay "conversaciones con terceros que han expresado interés en hacer arreglos para procurar liquidez adicional" a la isla, donde hoy se debatía en radios y cadenas de televisión por qué se había llegado a esta situación y de quién era la culpa.
Para el presidente del Senado, Eduardo Bhatia, la degradación es "una puñalada por la espalda", ya que "la situación fiscal hoy es objetivamente mejor que hace dos años", y para su homólogo en la Cámara de Representantes, Jaime Perelló, es "injusta", porque "por primera vez en la historia atendimos los asuntos que por años y décadas ninguna Administración tuvo el valor de atender".
Coincidiendo con muchas de las opiniones expresadas hoy, Perelló apuntó que "esto es un asunto de todos" y es "momento de trabajar con más ímpetu que nunca para levantar nuestra patria y dejar a un lado la mezquindad de la politiquería".
Ángel Rosa, presidente de la Comisión de Gobierno en Innovación Económica del Senado, coincidió en que "no es tiempo de apuntar dedos acusatorios con algo que es el resultado de 40 años de malas decisiones", sino de "concentrarnos en poner en vigor las políticas correctas para salir de este hoyo lo antes posible".
Como muchas otras voces en la isla caribeña, pidió al Ejecutivo que "convoque a partidos, sindicatos y organizaciones empresariales a una concertación patriótica" y apuntó que "es momento de repensar la razón de ser de muchas corporaciones públicas".
Desde la oposición, donde las acusaciones al Gobierno como responsable de la degradación eran la tónica general, también se oían hoy propuestas interesantes.
Entre ellas, la de enmendar al ley que obliga a bancos locales a invertir un mínimo del 34 % de los fondos depositados en las Cuentas Individuales de Retiro en bonos de Puerto Rico, ya que la degradación puede debilitar enormemente esas cuentas y a las entidades que las gestionan.
El minoritario Movimiento Independentista Nacional Hostosiano, que atribuye la degradación al "agotamiento" del modelo político "colonial" de Puerto Rico como Estado Libre Asociado de EE.UU., abogó por declarar una moratoria en el pago de la deuda y buscar financiación en América Latina y el Caribe, en lugar de en EE.UU.
El vicepresidente de la Federación de Alcaldes, Aníbal Vega Borges, propuso disminuir el número de municipios, y el presidente de la Asociación Productos de Puerto Rico, Manuel Cidre, fomentar la producción local y que la ciudadanía interiorice que "ahora más que nunca, cada dólar invertido en nuestros productos y servicios se traduce en generación de empleos y mejores condiciones de vida". / EFE.